ASUS ha presentado el ASUS Ascent GX10, un mini PC compacto diseñado para ofrecer potentes capacidades de computación en inteligencia artificial dentro de un formato reducido. Con unas dimensiones de 15 x 15 x 5 cm, este dispositivo busca combinar portabilidad con un alto rendimiento de procesamiento, orientado a tareas profesionales relacionadas con la IA. El ASUS Ascent GX10 se posiciona como una solución ideal para quienes necesitan potencia local sin depender de la nube, facilitando la ejecución de modelos complejos directamente en el equipo.
ASUS Ascent GX10: potencia de cálculo y arquitectura avanzada
En el corazón del ASUS Ascent GX10 se encuentra el sistema en chip Nvidia GB10, que integra una arquitectura heterogénea formada por 10 núcleos Cortex-A925 de alto rendimiento junto a otros 10 Cortex-A725 centrados en la eficiencia energética. Esta combinación ofrece hasta 1.000 TFLOPS de capacidad para IA, lo que permite al dispositivo actuar como un “superordenador personal para IA” según la propia ASUS. Este volumen de procesamiento facilita que desarrolladores, investigadores y científicos de datos puedan trabajar sin latencias ni dependencia de la nube, crucial para entornos donde la velocidad y la confidencialidad son prioritarias.
El ASUS Ascent GX10 incluye 128 GB de memoria RAM LPDDR5X, con un amplio ancho de banda pensado para soportar flujos de trabajo intensivos en IA. En cuanto al almacenamiento, viene equipado con cuatro unidades SSD M.2 2242 NVMe PCIe 4.0, que garantizan unos rápidos tiempos de transferencia y espacio suficiente para grandes conjuntos de datos y modelos. Aunque los 1.000 TFLOPS son una cifra impresionante, el rendimiento real dependerá de factores como la gestión térmica y la naturaleza de las tareas, algo especialmente relevante en un equipo tan compacto como este.
Sistemas de refrigeración eficientes
El ASUS Ascent GX10 incorpora soluciones de refrigeración avanzadas que incluyen dos ventiladores de 140 x 80 mm colocados estratégicamente para crear un flujo de aire efectivo desde la base del equipo. Este diseño ayuda a mantener temperaturas estables durante cargas prolongadas de trabajo intensivo, asegurando una performance constante en un formato pequeño donde disipar el calor es un desafío. Esta atención a la gestión térmica es clave para sostener el alto rendimiento que el ASUS Ascent GX10 promete durante sesiones largas.
Este mini PC se enmarca dentro de la estrategia de ASUS para ofrecer plataformas especializadas orientadas a entornos profesionales que demandan recursos flexibles y de alto rendimiento. Su capacidad para ejecutar múltiples modelos de IA de forma simultánea responde a las necesidades crecientes de los profesionales del sector, que buscan soluciones locales potentes y versátiles para sus flujos de trabajo. El ASUS Ascent GX10 es, por tanto, un paso más en la evolución de la informática cercana al usuario con foco en inteligencia artificial.