Debian 13, con nombre en clave Trixie, llegará anunciado para el 9 de agosto de 2025 e incorporará soporte oficial para la arquitectura RISC-V de 64 bits. Esta inclusión es un paso relevante dentro del panorama de distribuciones Linux que comienzan a ofrecer soporte nativo para RISC-V, sumándose a opciones reconocidas como Fedora, FreeBSD, OpenBSD, openSUSE o Ubuntu. En el caso de Debian 13, la implementación se centrará únicamente en procesadores RISC-V de 64 bits con endianness little-endian, lo que la posiciona de forma clara dentro de las arquitecturas más modernas y abiertas.
Debian 13 y el salto al soporte RISC-V de 64 bits
RISC-V se concibió en 2010 como una arquitectura abierta de conjunto de instrucciones, ISA, en la Universidad de California, Berkeley. Desde 2015, RISC-V International supervisa su desarrollo, promoviendo el modelo royalty-free que la distingue de otras arquitecturas propietarias como ARM, AMD o Intel, que dependen de licencias. Este enfoque abierto ha ido ganando tracción porque ofrece a la industria la posibilidad de desarrollar hardware sin ataduras comerciales, algo muy valorado por el ecosistema del software libre. La llegada de Debian 13 con soporte RISC-V consolida este movimiento que apunta a un futuro con menos dependencias restrictivas.
Pero no solo habrá novedades en cuanto a soporte de hardware. Debian, que nació en 1993 y es sinónimo de estabilidad y seguridad, renovará su sistema de tiempo interno. El cambio de la representación de tiempo de 32 a 64 bits busca evitar el conocido problema del año 2038, que afecta a sistemas que usan timestamps limitados a 32 bits y que pueden desbordarse en esa fecha. Esta actualización demuestra el compromiso de Debian 13 con la robustez y la longevidad técnica, algo fundamental para quienes dependen de esta distribución en entornos productivos y de misión crítica.
Para aquellos que quieran probar Debian 13 en equipos con arquitectura RISC-V, hay actualmente varias opciones de bajo coste disponibles en el mercado. Se pueden encontrar ordenadores con procesadores RISC-V entre 300 y 500 dólares (unos 280 a 470 euros), con lo que la experimentación práctica ya es asequible para desarrolladores y entusiastas. Además, existe documentación y recursos que facilitan la comprensión y el aprovechamiento del potencial de RISC-V, algo esencial para impulsar su adopción. La combinación de hardware accesible y software estable marca un antes y un después en el ecosistema.
Este movimiento de Debian 13 pone de manifiesto la creciente apuesta de la industria por los estándares abiertos en hardware y la voluntad de adoptar arquitecturas que garantizan independencia y sostenibilidad a largo plazo. A medida que más plataformas de software y hardware integren RISC-V, la implicación de distribuciones consolidadas como Debian será clave para fomentar la adopción masiva y la innovación en el sector. La llegada de Debian 13 con soporte oficial para RISC-V es una señal clara de que la arquitectura abierta está aquí para quedarse y crecer.