Google TV acaba de recibir una actualización que introduce una función muy interesante: ahora se puede ver el progreso de las actualizaciones de las aplicaciones directamente en la pantalla de inicio. Hasta ahora, la pantalla de inicio de Google TV organizaba las aplicaciones de forma lineal y las actualizaciones se gestionaban en segundo plano, muchas veces sin que los usuarios se dieran cuenta. Pero hay momentos en los que intentamos abrir una app en plena actualización y, entonces, aparece un anillo de progreso alrededor del icono.
Esta funcionalidad se activa siempre que una aplicación se esté actualizando a través de la Google Play Store, ya sea de forma automática o si el usuario inicia la actualización manualmente. Es notable destacar que este indicativo visual es similar a lo que encontramos en dispositivos Android, aunque puede variar en función del lanzador de pantalla de inicio que utilice cada uno.
La introducción de esta característica no tiene una fecha concreta y antes de la reciente renovación de la pantalla de inicio no existía. En ese rediseño, los iconos de las apps cambiaron a un formato circular. Aunque no está claro si esta funcionalidad estuvo disponible en la fase de rediseño, ha comenzado a llamar la atención recientemente, lo que sugiere que su presencia pudo haber pasado desapercibida hasta ahora.
Las pruebas realizadas han confirmado que la función del anillo de progreso funciona de manera consistente en una variedad de dispositivos, como el Google TV Streamer y el modelo Hisense U7N. Esta actualización proporciona feedback visual inmediato sobre el estado de las actualizaciones de aplicaciones, un avance que puede mejorar la experiencia general del usuario al reducir la incertidumbre sobre la disponibilidad de las aplicaciones durante su actualización.
Mejoras en Google TV
A medida que el panorama de las interfaces de Smart TV sigue evolucionando, este pequeño pero práctico ajuste resalta el compromiso de Google en perfeccionar la experiencia de usuario en Google TV. La visibilidad del progreso en las actualizaciones de aplicaciones puede influir considerablemente en cómo los usuarios interactúan con sus dispositivos, especialmente en entornos donde el rendimiento de las aplicaciones es esencial.