A pesar de ser un dispositivo muy curioso y que ha generado bastante expectación, Anki robot, del cual os hemos hablado en varias ocasiones, cierra sus puertas para siempre, por lo que dejará a sus usuarios colgados.
Es una lástima ya que el robot tenía muy buena pinta, no solo por la parte del asistente que integraba de forma nativa, sino por la entrada de Alexa en el robot, pudiendo preguntar al robot para que Alexa contestara de forma nativa.
Este cierre, es similar a Jibo, otro robot que acabo anunciando el cese de la empresa y que dejaba a gente con un robot, que no recibiría más asistencia ni servicios cloud con un coste de unos 800€ por usuario. El caso de Anki, no es tan barato, pero también dejará a los usuarios colgados con un robot que, en el mejor de los casos funcionará de forma autónoma en casa.
Estos dispositivos son bastante arriesgados para las empresas, ya que, son dispositivos caros que requieren de fuertes inversiones y, sin una cantidad grande de clientes para poder mantener lo que estos sistemas requieren de costes regulares. Una de las posibles soluciones ante estos problemas es que empresas como Amazon o Google acabaran comprando estas empresas para que pudieran aguantar, pero, si no se han metido en este sector todavía, entendemos que es porque son mercados todavía demasiado nuevos para el público como para ser rentables.
Fuente: voicebot
Pues el robot era muy simpático, pero demasiado (demasiadísimo) caro para lo que ofrecía.